Cuba tiene 7.000 organopónicos, pero este no fue el caso en el pasado. Cuba practicaba una forma de agricultura que dependía del petróleo desde hacía veinte años. El petróleo era de la Unión Soviética. El petróleo es un líquido natural aceitoso e inflamable que ocurre en la roca sedimentaria. ¡No es una substancia que quiero en mi comida! Cuando el gobierno de la Unión Soviética cayó, Cuba tuvo una crisis alimentaria. Cuba necesitaba buscar otra forma de agricultura que era independiente del petróleo.
Los organopónicos son el resultado de la crisis alimentaria en Cuba. Los organopónicos son huertos orgánicos que no usan petróleo. En estos jardines se cultivan vegetales y frutas como tomates, bananas, lechuga, calabaza, espinacas, berenjena y muchos otros frutas y vegetales. Todos los organopónicos usan métodos orgánicos, pero no todos funcionan de la misma manera. Algunos son del gobierno con trabajadores gubernamentales y otros son de hortelanos de los cooperativas.
Ahora, mi padre es productor de productos orgánicos en Honduras y mi familia tiene terrenos orgánicos que usa para cultivar productos para la familia, el barrio y el mercado. Mi padre leyó de los organopónicos en Cuba y adaptó las ideas para nuestros terrenos. Pienso que la agricultura orgánica y los organopónicos son los mejores métodos para la agricultura. La comida orgánica es saludable; en el cultivo orgánico, no se usan químicos dañinos ni petróleo que no queremos en comida. Es cierto que Cuba hizo un buen cambio cuando el país inventó los organopónicos. Ellos crean trabajos, producen comida saludable, natural, fresca y barata. La cualidad de la comida es mejor por la crisis del petróleo en Cuba.
Honduras ya tiene muchos cooperativos que cultivan el café orgánico, lo que es excelente. El modelo cubano de organopónicos que mi papá ha adoptado sería un buen modelo para el cultivo de vegetales y frutas en Honduras.
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